En la vibrante década de los años 60, un grupo de talentosos músicos emergieron de los barrios de Lima, Perú, con una propuesta innovadora que mezclaba rítmicas tradicionales con el fervor del rock y la psicodelia. Ese grupo se llamó Los Destellos, un nombre que iluminaría la historia de la música tropical. La banda fue fundada en 1966 por el brillante guitarrista Enrique Delgado Montes, quien es considerado el "Padre de la Cumbia Peruana".
Enrique Delgado Montes, nacido el 21 de marzo de 1939, tenía una capacidad innata para entender y reinterpretar la música que le rodeaba. Inicialmente influenciado por el bolero y la música criolla, pronto encontró en el emergente rock and roll un nuevo universo sonoro que conquistar. En 1966, junto a su cuñado, el bajista José "Pepe" Guevara, y otros talentosos músicos, comenzó la aventura que llevaría a Los Destellos a convertirse en un referente de la cumbia tropical moderna.
La propuesta musical de Los Destellos se caracterizó por fusionar elementos tan dispares como el rock psicodélico, el surf rock, y la cumbia. Este eclecticismo les permitió desarrollar un sonido único que capturaba tanto la esencia de la tradición tropical como la modernidad del guitarrista eléctrico. Temas emblemáticos como "Un Silbido Amoroso" y "El Avispón" mostraron al mundo los vibrantes colores de su música, repleta de energía y profundidad melódica.
No te pongas triste ni tampoco me resiste dar consejos yo.
Que tires pa´lante siempre alegre y elegante escucha esta canción,
Sigue por mi camino y no te bajes del bordillo,
Llegó la primavera con el canto de los grillos.
Y trae regalos pa´tenernos consolados y distraídos,
No te pienses nada solo vente a mi manada de bandido.
Y llévate un cacharro y corre no te quedes solo,
Llego la primavera con regalos para todos.
Un ventilador, fue el primer regalo
Pa´que se quiten las nubes grises en los días malos.
Que se lleve la basura de los aires contaminados
Pa´darle fresco a los animales de los documentales,
Y a esos deportistas que van delante de un león.
La primavera trompetera ya llego
Ya me despido del abrigo
Las muchachitas me vacilan con el sol
Niña vente conmigo y toma
Quema la goma q suelta el aroma
Pintando el aire de negras palomas
Por los callejones están creciendo muchas flores sin ningún control.
Los coches no andan sus ruedas son calabazas cuando brilla el sol.
Los niños mean en la calle no les hace falta pañales.
Es todo tan bonito que parece carnavales.
Destornillador, y algunos pinceles pa´la gente buena sin estudios ni papeles.
Que no exista el trabajo pa´los hombres y las mujeres.
Que todo el mundo tengan regalos los más grandes y los más caros.
Que la gente de mi tierra siempre sea muy feliz.