Tengo una novia maestra
Fue siempre fracaso mi vida en amores
Las veces que quise me jugaron mal
Ahora ya tengo mi fiel compañera
Y no habrá quimera que me pueda abrumar
Se que nos queremos con dulce vehemencia
El jardín del cielo en mí floreció
Porque eres mi reina, tierna idolatrada
Somos venturosos unidos tu y yo
el brillante follaje otoñal
fue testigo de nuestro querer
maestrita de mi litoral
soy quién sueña contigo un edén
el rasal de tu escuela talvez,
desde chica tu piel perfumó
y los rayos del sol guaraní
la belleza en tu cuerpo dejó.