El grupo Scouts nació en una pequeña ciudad de los Estados Unidos a principios del siglo XXI. Fundado por cuatro amigos de la infancia, Danny, Jake, Lisa y Sarah, el grupo surgió casi de forma accidental. Al igual que su nombre lo sugiere, todos compartían una historia común: eran miembros entusiastas de los Boy Scouts y Girl Scouts, una experiencia que forjó su pasión tanto por la naturaleza como por la música. Al principio, tocar canciones alrededor de una fogata era solo un pasatiempo, pero pronto se dieron cuenta de que tenían algo especial.
Inicialmente, Scouts se centraba en un estilo acústico que evocaba la serenidad de las noches al aire libre. Influenciados por géneros como el folk y el country, su música resonaba con la gente por su autenticidad y simplicidad. No obstante, a medida que ganaban popularidad, comenzaron a explorar otros géneros y sonidos, incorporando elementos del rock, el pop y la música electrónica. Esta capacidad para adaptarse y evolucionar les permitió atraer a una audiencia más amplia sin perder su esencia.
En 2005, lanzaron su primer álbum titulado "Caminos Bajo la Luna". Fue un éxito inesperado que los catapultó a la fama. Las canciones hablaban de aventuras, amistad y amor, y conectaron profundamente con jóvenes y adultos por igual. Temas como "Senderos del Alma" y "Bajo las Estrellas" se convirtieron en himnos y marcaron el inicio de una carrera fructífera.
Música
No he fallado a su llamada desde que la sentí,
y he querido llevarla alto y hacerla parte de mí,
y colmarla en sus deseos y aceptarle sus anhelos...
Por ser quien es.
La quería solo mía y no pudo ser.
Su mirada indefinida me hizo pronto saber,
que ella se debía a todos que debía volar
a lugares sin fronteras y volvernos a encontrar.
Cuando suenen los viejos acordes de la mágica guitarra,
reverencias del sonido, nuestras voces en camino
música, solo música, música en el alma.
De acampada en mi patrulla por caminos en flor,
la veía cabalgando sobre un rayo de sol,
escalaba mi mochila y volvía a volar,
regalándome un adiós.
El día de mi promesa se acordó de mi,
y sobre la pañoleta dejo parte de sí.
Me daba la enhorabuena, me animaba a seguir,
no la vi por ningún lado, pero se que estaba allí.
Cuando suenen los viejos acordes de la mágica guitarra,
reverencias del sonido, nuestras voces en camino
música, solo música, música en el alma