Swan Fyahbwoy, cuyo nombre real es Sergio Rodríguez Hernández, nació el 15 de diciembre de 1973 en Madrid, España. Conocido cariñosamente como el "Chico del Fuego", este artista español ha dejado una marca indeleble en la escena del reggae y dancehall en el país ibérico y más allá.
Durante sus años de adolescencia, Swan Fyahbwoy se vio atraído por diversos géneros musicales, pero fueron el reggae y el dancehall los que capturaron su corazón. La influencia de artistas internacionales y su pasión por estos ritmos jamaicanos lo impulsaron a experimentar con su propio estilo desde una temprana edad.
A principios de los 2000, Fyahbwoy comenzó a darse a conocer en la escena underground de Madrid. Con su energía inigualable y letras profundas, rápidamente captó la atención de muchos aficionados a la música reggae y dancehall. Su nombre artístico, "Fyahbwoy", deriva del inglés "fire boy", enfatizando su fuego interno y la pasión con la que aborda su arte.
El año 2006 marcó un punto de inflexión en su carrera con la publicación de su primer trabajo, "Nuh Real Shotta". Este mixtape logró una gran acogida y permitió a Fyahbwoy establecerse firmemente en la escena musical española. Canciones como “No Volverán” y “Fuego en el Fuego” resonaron fuertemente con los oyentes, dejándolos ansiosos por más.
Ya no recuerdo el color de ese día
Y no recuerdo por qué hubo dolor
Cada latido que se me perdía
Buscando como vivir sin tu amor
Y casi siempre se me hace de día
Dejando escrito con tinta el sabor
De cada beso que nunca nos dimos
Con un te quiero sincero y sin un por favor
Y yo las siete notas musicales
Tú, los siete pecados capitales
Yo agua pura de los manantiales
Y el instinto saliendo como animales, y sé
Era como un jarro de agua fría
Y un alma que estaba tan vacía, y tú
Diciendo que todo era mala mía
Y no entendía, no, no, no
Solo en tu cabeza creas la tortura
Por falta de afecto o por estar fuera de cobertura
Dicen que los pájaros se van si se acerca un huracán
Es lo que necesito y yo me lo debía
Guardo pétalos de cada rosa que se cae
Pero no corto las flores que la primavera trae
Y aunque siempre nadaré contra corriente
Busco la paz espiritual en el oriente
No, no, no, no
Suave como una katana
Acariciando una herida, sintiendo el filo
Y no, no, no, no
Como luz en la mañana
Recuperar la armonía, sentir que es mía
Hice rituales con la Luna y con mandrágora
Cada coordenada en el cuaderno de bitácora
Luz verde en el semáforo, vuelvo a prender el fósforo
Busca ser mejor persona, no una mala pécora
La mentira corre, pero como el karma volverá
Almas que no tiene precio y otras que no valen na'
Encontré la solución, no la tenía ningún químico
Pa que ahora todos los males me afecten lo mínimo