En el turbulento territorio del rock a principios del siglo XXI, se configuró una alineación explosiva que resonaría con fuerza: Velvet Revolver. La banda se originó en 2002, en Los Ángeles, California, de la mano de músicos que ya eran leyendas por derecho propio.
La unión de estos talentos dio lugar a Velvet Revolver, cuyo sonido feroz y actitud sin restricciones evocaba al apogeo del rock de los 80 y 90, aun estando inmersos en un nuevo milenio.
El primer álbum de Velvet Revolver, Contraband, se lanzó en junio de 2004. El disco fue un éxito comercial inmediato, debutando en el número uno en la lista Billboard 200. Canciones como "Slither" y "Fall to Pieces" se volvieron himnos, llevando a la banda a la cima de las listas.
El éxito de Contraband se vio reflejado en numerosos reconocimientos, incluyendo un premio Grammy por Mejor Interpretación de Hard Rock gracias a "Slither". A través de giras extensas, Velvet Revolver consolidó su reputación tanto entre los nostálgicos del rock clásico como entre una nueva generación de oyentes.
En 2007, Velvet Revolver lanzó su segundo álbum de estudio, Libertad. Con este trabajo, la banda exploró
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Last Fight
Ciudad siente como he estado de nuevo en la cárcel
No puedo haciendo tiempo, pero en la lata
Decantar de una rodilla en tierra
Sólo para pedir algo en que creer
Se fue de casa con un paquete de ropa
Sin un árbol genealógico
Esta lucha podría ser la última pelea
No dar ningún ganador
Una vez podría ser el tiempo extra
Si decidimos poner fin a la miseria
Ciudad cura todos los puentes quemados
Lleno de nada más que la miseria
Me pongo la máscara del hijo unbattled
Tratando de pedir algo en que creer
Salí de casa con un paquete de ropa
Sin un árbol genealógico
Esta lucha podría ser la última pelea
No dar ningún ganador
Una vez podría ser el tiempo extra
Si decidimos poner fin a la miseria
Romper las cadenas y sentir el peso de los gigantes
Con el soporte para los mentirosos eternos
Tienen miedo cuando nos escupen el fuego
Y empezar a vivir
Vivir
Viviendo ahora
la oración
Esta lucha podría ser la última pelea
No sin dejar ganar
Una vez podría ser el tiempo extra
Si decidimos poner fin a la miseria