El Grupo Ráfaga nació en Buenos Aires, Argentina, en 1994. Fundado por Omar Morel y Ricardo Paparazzo, el grupo fue ensamblado inicialmente como una banda de soporte para otros artistas del género. Sin embargo, su talento y carisma los llevaron rápidamente al estrellato.
En sus primeras formaciones, la banda incluía a músicos que se convirtieron en pilares del grupo, tales como Ariel Puchetta en la voz y Mauricio Juárez en los teclados. No pasó mucho tiempo antes de que estos músicos se dieran cuenta de que tenían una química especial que atrajo la atención tanto del público como de los críticos.
El primer álbum de Ráfaga, "Soplando Fuerte", fue lanzado en 1996 y contenía varios éxitos, entre ellos "La Luna y Tú" y "Mentirosa". Este álbum fue el inicio de una carrera brillante, que rápidamente los llevó a llenar estadios y a tocar en festivales de todo el mundo.
Con letras pegajosas y una puesta en escena vibrante, Ráfaga capturó los corazones de miles de fanáticos. Durante este periodo, lanzaron varios álbumes que se convirtieron en clásicos de la cumbia, tales como "Un Fenómeno Natural" y "Oro", consolidando su lugar en la historia de la música latina.
A medida que su popularidad crecía, también lo hacía su presencia internacional. El grupo realizó giras por América Latina, Europa e incluso Australia. Sus conciertos eran conocidos por su energía inigualable y su habilidad para conectar con el público.
Vete
Mi gran amor, mi devoción
nunca jamás te dejaré...
las promesas que te creí una vez
Mi gran amor, mi religión
ya lo verás te seré fiel
pero un día me traicionaste
tú me engañaste
CORO:
Vete, vete, vete que sin ti
aunque sufra no voy a morir
No mereces que te perdone
ni que llore por tus traiciones
Vete, vete, vete que sin ti
aunque sufra no voy a morir
Dejame sigue tu camino
ya tu amor prefiero lo olvido
Rompiste amor, desilusión
yo a cambio todo te entregué
y te amé como nunca imaginé
Mi gran amor, mi gran dolor
antojo fui de tu pasión
un capricho
sólo un juguete más a tu colección
CORO:
Vete, vete, vete que sin ti
aunque sufra no voy a morir
No mereces que te perdone
ni que llore por tus traiciones
Vete, vete, vete que sin ti
aunque sufra no voy a morir
Dejame sigue tu camino
ya tu amor prefiero lo olvido