Los Charros de Lumaco, una de las agrupaciones más emblemáticas de la cumbia ranchera chilena, surgieron en 1993 en la pintoresca comuna de Lumaco, en la región de La Araucanía. Fundados por el talentoso César Morales, conocido como "Chester", el grupo se formó con la intención de fusionar las raíces de la música ranchera mexicana con la cumbia, creando un sonido único que rápidamente conquistó corazones tanto en Chile como en otros países de América Latina.
Inicialmente, la banda se componía de músicos locales apasionados por la cumbia y la música ranchera. Junto a Chester, se unieron Pedro "Piri" Flores en el acordeón, Ricardo "El Charro" González en la batería, y Roberto "Tito" Leiva en el bajo. Desde el principio, el carisma y calidad musical del grupo se hicieron evidentes, destacando especialmente por sus exitosas adaptaciones de canciones clásicas rancheras mexicanas, pero con un ritmo más alegre y bailable.
En 1996, Los Charros de Lumaco lanzaron su primer álbum, titulado "Maldito Corazón". El disco incluyó éxitos como "Amor Limosnero" y "Como Dejar de Amarte", temas que no tardaron en sonar en todas las radios del país. Gracias a la calidez de sus líricas y la alegría de sus ritmos, la banda encontró un éxito inesperado, conquistando rápidamente una amplia audiencia.
En los años siguientes, el grupo realizó giras por varios países de América Latina, llevando
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Ingrata
Por darte todo,
estan mis manos vacías,
por transformar,
todo tu gran dolor en alegría.
Por darte todo,
estan mis brazos cansados,
he recibido como gran recompensa,
solamente una ofensa que me dejes de lado.
CORO
Ingrata,
no me has dejado ni un poquito de ti,
yo preocupado por hacerte una reina,
por verte mas bella y tu me das dolor,
ingrato amor...
Ingrata,
no me has dejado ni un poquito de ti,
luche como un león desde mi pobreza,
por darte riquezas y en cambio,
me estas matando...
Por darte todo,
hoy sufro en cada regreso,
para encontrarme con la casa vacía,
y tu ausencia de besos.
Por darte todo,
ya no me queda mas nada,
lloro en silencio y no encuentro respuesta,
al hablar con la almohada.
CORO(bis.)
Ingrata,
no me has dejado ni un poquito de ti,
yo preocupado por hacerte una reina,
por verte mas bella y tu me das dolor,
ingrato amor...
Ingrata,
no me has dejado ni un poquito de ti,
luche como un león desde mi pobreza,
por darte riquezas y en cambio,
me estas matando...