La historia de Accept comienza en los años 70 en la localidad de Solingen, Alemania. Es un relato fascinante de perseverancia y pasión por la música. La banda fue inicialmente concebida por el guitarrista Wolf Hoffmann y el bajista Peter Baltes, dos jóvenes entusiastas del rock.
A lo largo de sus primeros años, el grupo sufrió varios cambios en su alineación. Sin embargo, con la inclusión del carismático vocalista Udo Dirkschneider, Accept comenzó a formar su identidad musical, caracterizada por riffs potentes y una voz inconfundible.
El primer álbum homónimo, lanzado en 1979, no obtuvo un éxito inmediato, pero sentó las bases para lo que estaba por venir. Fue con su tercer álbum, "Breaker" (1981), cuando la banda empezó a recibir atención internacional. La mezcla de agresividad y melodía atrapó a los fans del heavy metal.
No obstante, el verdadero punto de inflexión llegó con "Restless and Wild" (1982) y, en particular, con "Balls to the Wall" (1983). Este último incluyó el icónico sencillo del mismo nombre, que se convirtió en un himno del género.
A lo largo de los años 80, Accept disfrutó de una creciente popularidad, pero el éxito vino acompañado de tensiones internas. Diferencias creativas y personales llevaron a la salida de Udo en 1987. La banda decidió continuar con nuevos vocalistas, lo cual resultó en variaciones de calidad en
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Monster Man
Gritando sólo por la misericordia
soy ningún hombre monstruo
conocimiento te hace culpable
no exento de fallos
Veo una lucha caliente caliente
en lados controversiales
me llaman asesino misericordia
Porque yo hice las cosas bien
Porque el amor me dio su vida decoloración
por el amor que tuve que renunciar a ti
No soy un hombre de monstruo - piedad o de la delincuencia
vivo o muerto, vivo o muerto
soy ningún hombre monstruo - piedad o de la delincuencia
Frente a todos los problemas
yo todavía recuerdo las noches
y estamos jurando tanto para liberarnos
cuando la vida es sólo el dolor
Por el amor que tuve que renunciar a ti
No soy un hombre de monstruo - piedad o de la delincuencia
vivo o muerto, vivo o muerto
soy ningún hombre monstruo - piedad o de la delincuencia
Hombre monstruo
No soy un hombre de monstruo - piedad o de la delincuencia
vivo o muerto, vivo o muerto
soy ningún hombre monstruo - piedad o de la delincuencia
vivo o muerto, vivo o muerto
No soy un hombre de monstruo ...