Desde las alturas de los Andes peruanos, Yarita Lizeth Yanarico Quispe ha emergido como una de las voces más emblemáticas de la música andina contemporánea. Nacida en una pequeña comunidad campesina en 1990, Yarita Lizeth se ha convertido en un icono de perseverancia y talento, logrando calar profundamente en el corazón de su audiencia con su increíble voz y su carismática presencia en el escenario.
La infancia de Yarita Lizeth estuvo marcada por el entorno rural y las tradiciones culturales de su comunidad. Su amor por la música comenzó a florecer desde temprana edad, inspirada por las melodías ancestrales y los instrumentos autóctonos que caracterizan la rica herencia musical de los Andes. Estas experiencias tempranas sentaron las bases de su futura carrera, imprimiendo en su música una autenticidad y una profundidad emocional que la hacen única.
A pesar de las dificultades económicas y las barreras que enfrentó, Yarita Lizeth perseveró en su sueño de ser cantante. Comenzó a presentarse en eventos locales y festividades tradicionales, ganando el reconocimiento y el aprecio de su comunidad. Su primer gran avance llegó cuando se trasladó a la ciudad de Puno, donde grabó su primer disco, el cual rápidamente capturó la atención de la audiencia regional.
El lanzamiento de su primer álbum fue solo el comienzo. La dedicación y el talento de Yarita Lizeth la llevaron a recorrer diversas ciudades y
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Déjame ya (oficial)
Te puedes ir
Ya no te detendré
Ya eres libre
Ya no te buscaré
Muchas veces te he rogado
Tanto te supliqué
Para que no me dejaras
Esta vez ya no lo haré
Solo pido a dios y al cielo
A que me haga olvidar
Todo el amor que sentía
Porque te tuve que amar
Déjame ya, déjame ya
ya no quiero verte
Vete ya por favor (BIS)
Compartí contigo
Tus momentos más difíciles
Y ahora, tu me abandonas
Pero que puedo hacer cariño mio
la decisión esta tomada
Me alejo de tu lado
Pero te doy las gracias
por los momentos inolvidables que pasamos
Adios, adios
Te puedes ir
Ya no te detendre
Ya eres libre
Ya no te buscaré
Muchas veces te he rogado
Tanto te supliqué
Para que no me dejaras
Esta vez ya no lo haré
Solo pido a dios y al cielo
A que me haga olvidar
Todo el amor que sentía
Porque te tuve que amar
Dejame ya, déjame ya
ya no quiero verte
Vete ya por favor (BIS)