Musica de Alen Ayerdi del Genero: Lyrics Todos los artistas y cantantes de música de Lyrics son individuos talentosos y apasionados que dedican su vida a crear y compartir su arte con el mundo. Su música de Alen Ayerdi tiene el poder de emocionarnos, inspirarnos y conectarnos a un nivel profundo. En este blog FoxMusicaDe, exploraremos el mundo de los artistas y cantantes de música del genero Lyrics, destacando su dedicación, creatividad y contribuciones a la cultura.
Los artistas y cantantes de música tienen la capacidad única de expresar sus emociones y experiencias a través de su voz y talento musical. A través de sus letras y melodías, nos llevan a un viaje emocional y nos permiten conectarnos con nuestras propias emociones.
Además de su talento musical, los artistas y cantantes son verdaderos profesionales en su campo. Trabajan arduamente para perfeccionar su
[Letra de "Bienvenido al Secadero"]
Agua que reconcome, desgasta y taladra
No mojará mi posada sin luz
Que aquí me atrevo a enjaularla y decirle de todo
Y se me enamora
Vuelve cuando me encuentro salvando los muebles
Para apilarlos y darles de arder
Para que ría y se haga de día sin amanecer
Sabe que la convido a comerse las llaves
Del purgatorio de mi naufragar
Que no conozco yesaire tan fino que luzca mi carraspera
Y temple mi torpe envite de acero caliente
Para joder con las patas de atrás
Y dar la vuelta y buscar la reyerta en otro trashumar
Bienvenido al secadero, ven a ver el desconcierto
Que tocan a muerto los kinkis besando con saña, los poligoneros
Los faquires que se acuestan junto a mí
Y apuntalan, escupiendo al viento, mis entrañas de viejo
Saca pa' los mosquitos el clavo y la albahaca
Que una ambrosía por fin sacaré
De mis recuerdos infectos en donde no flotan las carabelas
Llenas de redileo, trasquile y cadenas
Pero este sauce quiere sonreír
Y en adelante le queda el desplante para resistir
Bienvenido al secadero, ven a ver el desconcierto
Que tocan a muerto los kinkis besando con saña, los poligoneros
Los faquires que se acuestan junto a mí
Y apuntalan, escupiendo al viento, mis entrañas de viejo