Pídele A Dios
Ya con tantos reproches,
no aguanto, ya mi calma se me está acabando.
Tú, que siempre me vives gritando,
que de otro amor me estoy acostumbrando.
Ya no sé, si vivo contigo,
es que todavía te sigo amando.
Deberías de sentirte dichosa,
de tener a tu esposo a tu lado,
en las noches amándote tanto,
lo que otras mucho están deseando.
Si es que a veces no llego temprano,
es porque alguien me ha invitado un trago.
No me mires así,
no me grites ni pienses
que otra te está ganando.
Porque ya son muchos los reproches
y mi calma se me está acabando.
No me mires así,
no me grites,
porque ahorita me voy de tu lado.
Tranquilízate y no te atormentes,
porque después vas a lamentarlo.
Deberías de sentirte dichosa,
de tener a tu esposo a tu lado,
en las noches amándote tanto,
lo que otras mucho están deseando.
Si es que a veces no llego temprano,
es porque alguien me ha invitado un trago.
No me mires así,
no me grites ni pienses
que otra te está ganando.
Porque ya son muchos los reproches
y mi calma se me está acabando.
No me mires así,
no me grites,
porque ahorita me voy de tu lado.
Tranquilízate y no te atormentes,
porque después vas a lamentarlo.
En esta emotiva canción de Eliseo Robles titulada 'Pídele A Dios', se refleja un diálogo entre dos personas en una relación complicada. El narrador expresa su cansancio ante los constantes reproches de su pareja, mencionando que su paciencia se está agotando... Significado de la letra