El Palomito
Una palomita blanca de piquito colorado,
ayer yo la vi llorando en las cumbres de un guayabo.
Currucú, currucú, le cantaba al palomito,
currucú, currucú, que volviera a su nidito.
Blanca palomita, vuela, vuela por esa pradera,
aquí te estaré esperando aunque de dolor me muera.
Currucú, currucú, le cantaba al palomito,
currucú, currucú, que volviera a su nidito.
En las cumbres del guayabo, muy lejos del palomar,
ahí estaba la paloma llorando sin descansar.
Currucú, currucú, le cantaba al palomito,
currucú, currucú, que volviera a su nidito.