El acérrimo anfitrión de las tinieblas
Boujour!- dijo-
Soy el acérrimo anfitrión de las tinieblas.
Te permuto el alma por diversión, tengo la canción para tus oídos.
(Se que eres especial).
Bebe de mi copa y nunca tendrás hambres.
Serás aquel que siempre quisiste ser.
Acá la sorpresa es ser presa de tu cabeza.
Y nunca te distraigas, aquí nadie duerme.
Soy yo, aunque no me veas ya estoy adentro.
Soy el colmillo de tu sonrisa.
Soy ese brillo que está demás en tus ojos.
Soy el antojo de tu delirio, el disfraz que te consume.
La mentira que te adorna, mientras bebas de mi copa...
¡Serás eterno! Un eterno payaso preso de la ficción.
Y verás, que acá la cereza del postre es tu corazón en bandeja.
Nunca te distraigas aquí nadie duerme.