Obús, uno de los pilares del heavy metal en España, se formó en 1980 en Madrid. La banda originalmente estaba compuesta por Fortu Sánchez en la voz, Paco Laguna en la guitarra, Juan Luis Serrano en el bajo y Fernando Sánchez en la batería. En aquellos días, el movimiento del rock duro estaba emergiendo y grupos como Obús romperían barreras y despejarían el camino para futuras bandas.
En 1981, lanzaron su primer álbum, Prepárate. Este disco fue un éxito instantáneo y consolidó a Obús como una de las referencias del heavy metal en España. Temas como "Va a estallar el obús" y "Pesadilla nuclear" se convirtieron en himnos para los fanáticos del género. La mezcla de letras contundentes, riffs potentes y una actitud escénica enérgica, conectó rápidamente con el público.
Obús siguió su camino de éxitos con la publicación de Poderoso como el trueno en 1982. Luego, El que más (1984) y Dejarse la piel (1986) continuaron consolidando su reputación como una de las bandas más influyentes del país. En estos años, realizaron multitud de conciertos, logrando una conexión especial con los fanáticos gracias a su poderosa presencia escénica y una comunicación directa con el público.
En 1991, después de la publicación de Otra vez en la ruta, la banda decidió hacer una pausa y separarse. Durante casi una década, Obús estuvo inactivo, pero los miembros siguieron involucrados en la música y diversos proyectos personales.
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El Destino Jugó Con Sus Cartas
Alguien me contó que te ha visto
Que no pareces ya la de ayer
Algo se cruzó en tu camino
Y dentro de ti todo cambió
Pasaste de jugar con tus muñecas
A un juego peligroso
Y arriesgado a la vez
El destino jugó sus cartas
Y mano tras mano ganó él
Se te escapó
La alegría del rostro
Te consumió
Como el fuego al tabaco
Tu cara no es
La del carné
Viviste en un año
Lo de cien
Se te escapó
La alegría del rostro
Te consumió
Como el fuego al tabaco
Tu cara no es
La del carné
Viviste en un año
Lo de cien
Caminaste por el borde del abismo
Pensando que contigo
No iba el juego tal vez
Bajaste un momento la cabeza
Y el borde estaba sobre ti
Se te escapó
La alegría del rostro
Te consumió
Como el fuego al tabaco
Tu cara no es
La del carné
Viviste en un año
Lo de cien