Maricela, conocida a lo largo y ancho de América Latina como "La Dama de Hierro de la Música Romántica", ha dejado una huella indeleble en el panorama musical con baladas llenas de sentimiento y una voz inigualable. Su carrera está marcada por la devoción a su arte y una capacidad impresionante para conectar emocionalmente con su público. Este artículo se adentra en la vida y la carrera de Maricela, explorando sus inicios humildes, su ascenso a la fama y su legado perdurable.
Maricela Hernández, nacida el 24 de diciembre de 1966 en Los Ángeles, California, creció en una familia de origen mexicano. Desde pequeña, mostró un talento extraordinario para la música, a menudo cantando en reuniones familiares y eventos escolares. La comunidad local pronto reconoció su talento innato, lo que la impulsó a seguir una carrera musical de manera más formal.
Maricela comenzó su carrera profesional a principios de la década de 1980, participando en varios concursos de talento y actuando en bares y clubes locales. Su gran oportunidad llegó cuando fue descubierta por el productor musical Gilberto Barrera, quien quedó impresionado por su voz y su presencia en el escenario. Con su ayuda, Maricela firmó su primer contrato discográfico y lanzó su primer álbum, "Sin Él", en 1984.
El álbum "Sin Él" contó con baladas románticas que rápidamente se convirtieron en éxitos. La canción homónima, "Sin Él", se colocó en los primeros lugares de las
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Vete con Ella
Vete con ella, cues,
y no me digas nada,
te ahorras las palabras,
ya lo dice tu mirada,
que tristeza me da, pues yo nunca
pude darte, esa felicidad
que encontraste en otra parte.
Te amo tanto que te entrego
con mi vida por tu vida,
si conmigo no eres feliz
no detengo tu partida,
solo espero que te de su amor
sin recervas, ni egoismo,
no quisiera un dia verte sufrir
como yo por lo mismo.
Vete con ella, cues,
y no me digas nada,
si conmigo no eres feliz
no detengo tu partida,
solo espero que te de su amor
sin recervas, ni egoismo,
no quisiera un dia verte sufrir
como yo por lo mismo.
Vete con ella, cues,
y no me digas nada.