No me lo tomes a mal
Si por ti perdí el sentido,
si no sé ni lo qué digo,
no me lo tomes a mal.
Y si quiero estar contigo, mi bien,
no, no me lo tomes a mal.
Si te cuenta algún amigo,
que parezco ya un mendigo,
que perdí la dignidad.
Y que estoy como enyerbada,
empeñada en recordarte nomás,
no me lo tomes a mal.
Te prometo que yo nunca diré,
que tú fuiste quien causó mi dolor.
Y tu nombre con fervor callaré
para que mi voz no manche tu honor.
Si te cuenta algún amigo,
que parezco ya un mendigo,
que perdí la dignidad.
Y que estoy como enyerbada,
empeñada en recordarte nomás,
no me lo tomes a mal.
(¿Por qué me humillas, corazón?
Yo te quiero.)
Te prometo que yo nunca diré,
que tú fuiste quien causó mi dolor.
Y tu nombre con fervor callaré
para que mi voz no manche tu honor.
Si te cuenta algún amigo,
que parezco ya un mendigo,
que perdí la dignidad.
Y que estoy como enyerbada,
empeñada en recordarte nomás,
no me lo tomes a mal.