40 Gramos es una banda que ha dejado una profunda huella en el panorama musical contemporáneo, con un estilo que combina la pasión, la técnica y una creatividad desenfrenada. Este grupo ha logrado conquistar a una vasta audiencia, desafiando las fronteras de los géneros musicales y creando un sonido totalmente único. A lo largo de su carrera, su evolución y la dedicación de sus integrantes han marcado una diferencia en la escena musical.
La historia de 40 Gramos comienza a mediados de la década de 2000 en una ciudad pequeña pero vibrante. Los miembros fundadores, Juan Delgado (vocalista y guitarrista), Raquel Martínez (bajista) y Pablo Suárez (batería), se conocieron en la universidad. Unidos por su amor por la música y su deseo de experimentar con nuevos sonidos, empezaron a tocar juntos en pequeños locales y bares.
A estos tres talentosos músicos se unió más tarde Clara Hernández (tecladista), completando así la formación original. Clara aportó una nueva dimensión a la banda, añadiendo capas sonoras y diversidad a su estilo.
Los comienzos de 40 Gramos fueron humildes. Tocaban principalmente en eventos locales y fiestas universitarias, pero su entusiasmo y energía llamaron rápidamente la atención. En 2005, se animaron a grabar su primer EP titulado Raíces. Este trabajo fue admirado por su frescura y originalidad. Las letras poéticas de Juan, combinadas con la destreza musical de Raquel, Pablo y Clara, hicieron de este EP un pequeño éxito en la escena indie.
El verdadero despegue de 40
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Armónica
Esta es la última canción que haré
Entre nosotros buena historia, ya cerré
Sólo espero que te traten bien
Y que te quieran como yo no lo pude hacer
Y que no lloren tus ojos
Y que no lloren mis ojos
Estarás bien, estaré bien
Sanarán las heridas
Hay un lugar para cada quién
Tener con quién buscar felicidad
Ella es un ángel que siempre cuido
Desde demonio, quedarme con Dios
Quizás la suerte no vuelva a tener
Como esa noche de sargento donde te encontré
Y que no lloren tus ojos
Y que no lloren mis ojos
Estarás bien, estaré bien
Sanarán las heridas
Hay un lugar para cada quién
Tener con quién buscar felicidad
(Solo)
Será que solo me queda admitir
Que fuiste linda, pero hoy tengo que partir
El día que me heriste no pude olvidar
Busco ahora alguien que me diga siempre la verdad
Y que no lloren tus ojos
Y que no lloren mis ojos
Estarás bien, estar
Sanarán las heridas
Hay un lugar para cada quién
Tener con quién buscar felicidad