Mal Momento es una de las bandas más emblemáticas del punk argentino. Desde su formación, han dejado una huella imborrable en la escena musical con su estilo auténtico y su energía incontrolable. A lo largo de los años, la banda ha experimentado diversas transformaciones y ha mantenido una conexión profunda con su público, consolidándose como una fuerza insuperable del rock en Argentina. Aquí se detalla su historia, sus logros más importantes y su legado perdurable.
Mal Momento se formó en Buenos Aires en 1987, en una época donde el punk rock comenzaba a tomar fuerza en Argentina. La alineación original incluía a Federico Tirri (voz), Jorge Serrano (guitarra), Adrián Espósito (bajo) y Daniel Vitale (batería). Estos jóvenes músicos unieron sus talentos y pasiones para crear una banda que exudaba rebeldía y sinceridad en cada nota.
Desde sus primeros ensayos, Mal Momento mostró una gran afinidad por el estilo punk, destacándose por sus letras directas y una actitud desafiante. Las influencias de bandas internacionales como The Ramones y Sex Pistols se hicieron evidentes en su música, pero rápidamente encontraron su propia voz dentro del género.
A medida que Mal Momento comenzó a tocar en vivo, su energía y autenticidad capturaron la atención del público y de otros músicos dentro de la escena punk. Sus conciertos eran conocidos por su intensidad y por la capacidad de la banda de conectar de manera inmediata con la audiencia. Este
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Letra No te animabas - Mal Momento
Toda la noche sin dormir pensando en vos
quiero dormir pero en brazos del ayer
el gusto amargo en aquel beso del adiós
y me distes sexo llorando que bajón
no te animabas a decirme que ya no
sentías nada en tu pequeño corazón
no te animabas a decirme que ya no
sentías nada en tu pequeño corazón
quisiera odiarte por no sentir compasión
de las heridas de un maldito perdedor
ya no te debo ni te acepto explicación
vos te burlaste y eso se llama traición
ahora no digas que yo no te avise
nunca mas voy a ser el esclavo de vos
toda la noche sin dormir pensando en vos
quiero dormir pero en brazos del ayer
el gusto amargo en aquel beso del adiós
y me diste sexo llorando, que bajón