En el vasto universo del rock argentino, Ciro y Los Persas se destaca como una de las bandas más icónicas de las últimas décadas. Fundada en 2009 por Andrés Ciro Martínez, ex líder de la mítica agrupación Los Piojos, la banda ha sabido fusionar la contundencia del rock con la sensibilidad poética, creando un estilo único que les ha permitido ganarse tanto el reconocimiento de la crítica como el amor del público.
Nacido el 11 de enero de 1968 en Buenos Aires, Argentina, Andrés Ciro Martínez es mucho más que el vocalista de Ciro y Los Persas. Su carrera comenzó mucho antes, en la década de los ochenta, cuando fundó Los Piojos, una banda que en poco tiempo se convertiría en un referente del rock nacional. Con Los Piojos, Ciro no solo demostró su capacidad para escribir letras profundas y emotivas, sino también su habilidad para conectar con el público de una manera casi mágica.
Tras la disolución de Los Piojos en 2009, Andrés Ciro decidió que su camino en la música estaba lejos de llegar a su fin. Así nació Ciro y Los Persas, una banda que desde sus primeros días prometía continuar con el legado de su líder, pero también explorar nuevas sonoridades y temáticas. La alineación inicial incluía a músicos talentosos como Juan Manuel Ábalos
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Asoma,
Toda su fuerza levanta.
Parece,
Hoy va a ser un dia normal, igual, que ayer.
Elefante mil pies, cruza la calle veloz,
Vuelan aves de papel.
Despierta, la selva
Sale el mundo a buscar el pan y el mango.
Y un viejo que hoy ya no verá este sol,
Y un joven que no durmió,
Una niña, niña ya no es más,
Llora un bebé, por primera vez!
Arranca la jungla su motor
Suenan las bocinas y el tambor,
Copan avenidas y el calor.
Cebras y panteras que desfilan,
Y el rinoceronte en doble fila,
Los gorilas siempre con sillón de piel… de mono.
Dame en esta jungla un lugar que se pueda
Subir a la copa del árbol mayor,
Para ver un cielo lejos de promesas huecas,
Envidias codicias y de falso amor.
Y un viejo tucán ya no verá este sol,
Hijo ‘e tigre no durmió,
Suricata ya no será igual,
Grita un loro, por primera vez!
La jirafa muestra su elegancia
Y una hiena cumple una venganza, pa, pa, pa, pa, pa,
Y no, y no resulta ser.
El mono tití vende quiniela,
Y el león se limpia lentejuelas,
De la noche, porque ahora, porque ahora es juez!
Dame en esta jungla un lugar que se pueda
Subir a la copa del árbol mayor,
Para ver un cielo lejos de promesas huecas,
Envidias codicias y de falso amor.
Dame en esta jungla un lugar que se pueda,
Mirar a los ojos sin pensar después,
Y ver a la luna libre de tinieblas,
Tinieblas del alma que no dejan ver.