Sebastian es más que un nombre; es un fenómeno musical que ha tocado innumerables corazones y dejado una huella imborrable en la historia de la música contemporánea. Fundado en la década de 1990, este grupo ha cruzado barreras geográficas y generacionales, llevando su mensaje de amor, introspección y resistencia por todo el mundo.
La historia de Sebastian comienza en una modesta ciudad en California, Estados Unidos. Fue en 1991 cuando cuatro amigos de la infancia, John Smith, David Miller, Maria Gonzalez y Eric Johnson, decidieron unir sus talentos para formar una banda. Influenciados por una vasta gama de géneros musicales, desde el rock clásico hasta el pop y la música folk, el grupo desarrolló un sonido auténtico y distintivo.
El nombre 'Sebastian' fue elegido en honor a San Sebastián, un mártir que, según la leyenda, exhibió una valentía inquebrantable frente a la adversidad. Así, la banda deseaba transmitir una sensación de resistencia y esperanza en sus letras y melodías.
El álbum debut de Sebastian, titulado "Echoes of Infinity" (1993), sorprendió tanto a críticos como a fanáticos. Su primer sencillo, "Whispers in the Wind," rápidamente escaló a los primeros lugares en las listas de popularidad. La profundidad lírica estaba acompañada por una instrumentación rica y variada, lo que hizo que la banda ganara reconocimiento casi instantáneamente.
No soy de Piedra
Basta de mirarme
con tus ojos dominantes que desnundan,
de pronto me invaden
sentimientos que no puedo controlar.
Te vas insinuando con tu forma de hablar
me estas convenciendo y quisiera escapar
pero no soy de piedra y me quedo
y me quedo.
Basta de tocarme con tus manos
no ves que me desespero,
y la sangre me circula a mil por horas
cuando tu estas tan cerca
Me vas atrapando con tu juego sexual
como una telaraña y quisiera escapar
pero no soy de piedra
y me quedo y me quedo...
Y me quedo, y me quedo
no soy de piedra y realmente es algo bueno
y me quedo, y me quedo
no soy de piedra ya no quiero escapar.