En el vibrante escenario musical de principios de la década de 2000, un nuevo grupo emergió con fuerza: Junior. Formado en 2002 en la ciudad de Madrid, España, el grupo estaba compuesto por cuatro talentosos jóvenes: Ana, Carla, Lucas y Sergio. Con edades comprendidas entre 16 y 18 años, estos adolescentes perseguían un sueño común: conquistar el mundo de la música con su inconfundible estilo pop.
La química entre los miembros de Junior fue evidente desde el primer ensayo. Gracias a sus melodiosas voces y pegajosos ritmos, rápidamente captaron la atención de las discográficas. En 2003, firmaron su primer contrato con Sony Music, dando inicio a una carrera llena de éxitos y desafíos.
El lanzamiento de su primer álbum, “Sueños de Juventud”, fue un éxito instantáneo. Con hits como “Vuela Alto” y “Nuestro Momento”, Junior se convirtió en un fenómeno en España y América Latina. Las letras frescas y pegajosas junto con una producción impecable consolidaron su lugar en el panorama pop.
La banda no solo brilló en las listas de éxitos, sino también sobre los escenarios. Realizaron una extensa gira que abarcó varios países y ciudades, recibiendo el cariño y la admiración de miles de fans. Dicho éxito fue reconocido con varios galardones, incluyendo múltiples premios en los Latin Grammy y los MTV Europe Music Awards.
Ver BiograFia Completa
Não se pode matar um crente.
Quem é salvo não morre, não!
Ele sobe à presença de Deus
Pra receber galardão
Roupas alvas, tão limpas e puras
Ele veste pra vida maior
Perde tudo por amor a Cristo
Pra viver em uma vida melhor.
[Coro]
Não, não se pode matar um crente.
E jesus realmente falou assim:
Quem perde a vida por mim
Tem sorte porque sua morte
Não é o fim.
Meu irmão que estás com medo
De quem pode tua vida tirar
Pensas no inimigo maior
Que pode tua alma ceifar.
Ó não temes, nem cales ao mundo
Vai orando e buscando poder
E verás na hora da morte
Que o Senhor não te deixa morrer.
Os romanos se divertiam
Vendo as feras matar os cristãos
Não sabiam que lá nas arenas
Gotas de sangue eram grãos
Que brotavam e se espalharam
E de Deus recebendo poder
Pra provar a alguém deste mundo
Que um crente não pode morrer.