Pequeña amante mía
No puedo acostumbrarme
a despertar sin ti,
amiga amada mía,
te necesito aquí.
Afuera queda el mundo,
y aquí la libertad.
Solo nos hace libres amar.
Realidad, qué increíble realidad,
desearte tanto tiempo,
y amarte ahora así.
Y soñar un lugar para vivir,
no, no puedo acostumbrarme
a amanecer sin ti.
Estás como una niña,
desnuda frente a mí.
Tan frágil, tan amante,
tan niña, tan feliz.
Descanso entre tus brazos,
y me despierto en ti.
Quiero que estémos siempre así.
Olvidar, no podría olvidar
la tibieza de tus manos,
tu hermosa libertad.
Te amo así,
mi poema, mi verdad,
tú, pequeña amante mía,
mi despertar.
Realidad, qué increíble realidad,
desearte tanto tiempo,
y ahora amarte así.
Y soñar un lugar para vivir, no, no.
No, no puedo acostumbrarme
a despertar sin ti.