Lirika Inverza es un nombre que resuena fuertemente en la escena del rap mexicano y latinoamericano. Se trata de un proyecto musical que no solo ofrece ritmos contagiosos, sino también letras profundas que invitan a la reflexión y al cambio. A través de sus canciones, Lirika Inverza ha conseguido atraer a un público diverso y crítico, consolidándose como una de las voces más influyentes del género.
Nacido como Diego Ortega en la Ciudad de México, Lirika Inverza mostró interés por la música desde muy joven. Su incursión en el rap comenzó en la adolescencia, cuando descubrió la capacidad del género para contar historias y expresar emociones de manera cruda y honesta. Inspirado por artistas de renombre tanto nacionales como internacionales, empezó a escribir sus propias rimas, utilizándolas como una vía para canalizar sus pensamientos y experiencias.
A principios de los años 2000, Diego adoptó el nombre artístico de Lirika Inverza. Este alias refleja su estilo único: "Lirika" como una referencia a la parte lírica y poética de sus textos, e "Inverza" para representar su enfoque contracorriente y crítico de la sociedad. Este nuevo nombre no tardó en calar hondo entre sus seguidores, quienes encontraron en su música una forma de resistir y cuestionar el statu quo.
El lanzamiento de su primer álbum, En El Valle de los Olvidados, marcó un antes y un después en
Epicentro
Estoy sintiendo respirar al mundo vibración gigante,
Terna bendita espiral concédele un instante,
Si prestas atención hay magia oculta en todas partes,
Mirar es un reflejo aprender a ver es arte,
Aprender a no callarse es defender tu ideología,
Pero hablar sin decir nada es la peor de las groserías,
Duda de las profecías, confía en tus decisiones,
Pues el único destino es el que forjan tus acciones,
Ignorar es la mayor prisión, saber es auto destrucción,
Lo real es solo una ficción que fabrico el imperio,
Inútil es toda oración ya que sin acción no hay reacción,
Quien dijo que el tiempo es doctor seguro murió enfermo,
A veces pienso si hablar de esto me va llevar algún sitio,
O es mejor ponerme un precio y hacer música pa´ simios,
Pero en vez de ser un dios de barro en un altar endeble,
Seré el epicentro que haga que sus altares tiemblen,
Estoy bebiendo vino tinto en el sillón de mi sala,
La fama toca mi puerta la luz toca mis ventanas,
Parecen tiempos mejores pero mi fe sigue muerta,
Por eso puse cortinas y un candado en esa puerta,
En esta escena de rap que más que escena es solo es un cumulo,
De rapers con un flow enorme y discursos minúsculos,
Cargando obscuridad ellos cadenas yo aquí músculos,
Me siento Nosferatu en el reparto de crepúsculo,
3:35 am tengo ambos ojos abiertos, olvide como dormir,
Me acostumbre a soñar despierto,
A caminar por la calle con un gesto de hombre muerto,
Y suelo sentirme vivo cuando estoy en un concierto,
Pues no escribo por dinero ni por fama ni por gloria,
Hace años que todo lo que escribo tiene vida propia,
Hoy solo quiero trascender romper la escala transitoria,
Deje de hacer Hip Hop para empezar hacer historia…