En la década de los 80, un grupo de jóvenes entusiastas de la música se reunió para formar lo que se convertiría en una de las bandas más emblemáticas del rock catalán: Sopa de Cabra. La banda se originó en Girona, una ciudad en el noreste de Cataluña, España. Sus miembros fundadores fueron Gerard Quintana (vocal), Jaume "Peck" Soler (guitarra), Josep Thió (guitarra), Francesc "Cuco" Lisicic (bajo) y Josep Bosch (batería).
Inicialmente, comenzaron tocando en pequeños locales y bares, ganando popularidad con sus actuaciones enérgicas y su enfoque audaz hacia el rock. A medida que ganaban seguidores, sus presentaciones se volvían más frecuentes y aumentaba la escala de sus conciertos.
En 1989, Sopa de Cabra lanzó su primer álbum homónimo, Sopa de Cabra, que incluyó temas icónicos como "L'Empordà" y "El boig de la ciutat". Esta producción marcó el inicio del reconocimiento de la banda en el ámbito musical catalán y les permitió consolidar su identidad sonora con una mezcla de rock puro y líricas en catalán, algo poco común en ese momento.
Su segundo álbum, La Roda (1990), también tuvo un notable éxito y continuó ampliando su base de seguidores. Canciones como "Si et quedes amb mi" y "Mai trobaràs" se convirtieron en grandes éxitos. Con este disco, la banda no solo solidificó su estilo, sino que también demostró una evolución en su lírica, abordando temas más profundos y personales.
El sol a la cara, m'estàs esperant,
continuo caminant, no em veus passar,
voldria oblidar-ho tot durant un temps,
a tu, a tothom, cada lloc que conec.
I vaig mirant fixament
els ulls dels que passen davant meu
i no veig ningú que estigui content.
Quants cops m'has dit que penso massa,
les suposicions no et fan anar endevant,
quant de temps estarà fora de casa.
Tot potser que passin uns anys.
tot potser que passin uns anys.
Buscaré sota el cel
el sol de l'hivern
sense saber si soc aquell que ara en té por
de seguir un camí que no és el seu
i si tot em va bé, i encara puc, tornaré
pobre, brut, però somrient.