El Fuereño
Llegó un fuereño a Camargo
al paso de su montura,
traía en su mente un encargo
y en su mirada amargura.
Pensaba que aquel poblado
era el fin de su aventura.
El pueblo estaba de fiesta,
pues se casaba Petrita.
Las campanas de la iglesia
sonaban para la misa.
Los rostros de la pareja
se iluminaban de risa.
Petrita dijo a su amado
al entrar en la parroquia:
"De este recinto sagrado
saldré feliz y dichosa.
Cuando ya estemos casados,
seré tu amante y tu esposa."
Con un disparo de máuser
se oyó la voz del fuereño:
"Aquí estoy para matarte
antes que logres tu empeño.
Con nadie podrás casarte,
porque yo he sido tu dueño.
Por ser un pobre ranchero,
te burlaste de mi amor.
Y te viniste a este pueblo
por un partido mejor.
Me hiciste garras el pecho
y estoy loco de dolor."
Cuatro balazos se oyeron,
Petrita se estremeció.
Los invitados corrieron
y el novio solo quedó,
porque también el fuereño
otro balazo se dio.
Llegó un forastero a Camargo con aire misterioso, su mente cargada de un oscuro encargo y sus ojos reflejando amargura. El poblado celebraba el matrimonio de Petrita, las campanas resonaban alegres y los rostros de la pareja irradiaban felicidad.... Significado de la letra