Cucurrucucú paloma
Dicen que por las noches,
no más se le iba en puro llorar.
Dicen que no comía,
no más se le iba en puro tomar.
Juran que el mismo cielo,
se estremecía al oír su llanto,
como sufrió por ella,
y hasta en su muerte la fue llamando.
Ay, ay, ay, ay, aym cantaba,
ay, ay, ay, ay, ay gemía.
Ay, ay, ay, ay, ay lloraba,
de pasión mortal moría.
Que una paloma triste,
muy de mañana le fue a cantar,
a su casita sola,
con sus puertitas de par en par.
Juran que esa paloma,
no era otra cosa más que su alma.
Que todavía la espera,
a que regrese la desdichada.
Cucurrucucú paloma,
cucurrucucú, no llores.
Las piedras jamás, paloma,
¿qué van a saber de amores?
Cucurrucucú, cucurrucucú,
cucurrucucú, paloma,
ya no le llores.