Mi amiga soledad
Llueve sin parar,
y la noche se despierta,
y vuelve a mí la soledad.
Paso sin pasar,
no me sigue ni mi sombra,
con la cual solía hablar.
Sabes que, amiga soledad,
que te odio y te extraño a la vez.
Sabes que me he acostumbrado a ti,
ya tienes cuerpo de mujer.
Solo soledad,
pues las horas pasan muertas,
sin que el sol llame a mi puerta.
Huyo de la luz,
de la gente, de mí mismo,
del amor, de la verdad.
Sabes que, amiga soledad,
que te odio y te extraño a la vez.
Sabes que me he acostumbrado a ti,
ya tienes cuerpo de mujer.
Llueve sin parar,
y la noche se despierta,
y vuelve a mí la soledad.
Llueve sin parar,
y mi vida está dormida, pues sin ti,
no hay nada más.