Qué bonito sería
Qué bonito sería,
si tus ojos se vieran en mis ojos,
ser tu falda y enredarme en tu cuerpo,
ser palabra en tu voz cálida y quedo.
Qué bonito sería
ser el sueño que sueñas, cuando duermes,
ser la espera por quien te desesperes,
y en tu sed ser el agua que tú bebes.
Qué bonito sería
de tú entrega ser parte y buen motivo
para hacer de tu amor mudo testigo,
y ser, entre otras cosas, un amigo.
Qué bonito sería,
si por esas extrañas coincidencias
cualquier día de esos que se antojan,
transparente, de plano, tú me encuentras.
Qué bonito sería
ser anhelo entre todos tus anhelos,
y ser brisa y ser viento en tus cabellos,
ser ojera de uno de tus desvelos.
Qué bonito sería
ser el beso que desean tus labios,
ser una sentida carta entre tus manos
y un recuerdo entre tu tibio regazo.
Qué bonito sería
de tu entrega ser parte y buen motivo
para ser de tu amor mudo testigo,
y ser, entre otras cosas, un amigo.
Qué bonito sería,
si por esas extrañas coincidencias
cualquier día de esos que se antojan,
transparente, de plano, tú te quedas.