Si tuviera un barco
Jugando en la arena vi un barco pasar,
como pasa todo lo que ha de llegar.
Me senté en la arena, escribí tu nombre,
y me vi a tu lado en mi niñez pobre.
Recordé, chiquilla, cuando fuimos niños,
y que en una calle crecimos unidos.
Si tuviera un barco, me dije sonriendo,
surcaría las aguas de tu pensamiento.
Si tuviera un barco, me dije sonriendo,
surcaría las aguas de tu pensamiento.
Caminé despacio la playa desierta,
y me vi en la infancia de mi vida incierta.
Escribí tu nombre detrás de mis huellas,
y al voltear a verlas, quise yo ser ellas.
Y el recuerdo, amigo, que nunca me deja,
me dijo "chiquilla, que todo se aleja."
Si tuviera un barco, me dije sonriendo,
surcaría las aguas de tu pensamiento.
Si tuviera un barco, me dije sonriendo,
surcaría las aguas de tu pensamiento.