Como en el vuelo de un gorrión
Si te vas a marchar,
déjame sin un adiós.
No me expliques porqué,
pues yo no lo podré entender.
Solo vete sin más;
déjame en soledad.
Tu perfume aquí estará,
en mi almohada y mi piel.
Tu recuerdo anidará
en mi corazón vacío,
donde siempre vivirá.
Si me vas a dejar
solo vete sin hablar,
en silencio sutil,
como en el vuelo de un gorrión;
imprevisto y gentil.
Sin llorar, sin reír,
tus alas te llevarán
hacia donde has de ir.
Y aquí yo me quedaré,
abrazado a tu recuerdo
y añorando tu querer.