Culpa
Tú no, jardín,
ni tus insectos, tu fuentes, ni tus aves.
Ni tú, cielo,
infinito presente creado
de nubes y de auroras,
ni tu alegría del sol que siempre ríe.
Ninguno de vosotros sois bastante.
Prestadme lágrimas
para sacarme fuera,
y después abrazaros a mi alma,
para así poder gustar
de vuestra presencia impecable y noble,
mil veces más amable,
mil veces más amable
que el porqué de mi llanto.
Tú no, jardín,
ni tus insectos, tu fuentes, ni tus aves.
Ni tú, cielo,
infinito presente creado
de nubes y de auroras,
ni tu alegría del sol que siempre ríe.
Ninguno de vosotros sois bastante.
Prestadme lágrimas
para sacarme fuera,
y después abrazaros a mi alma,
para así poder gustar
de vuestra presencia impecable y noble,
mil veces más amable,
mil veces más amable
que el porqué de mi llanto.