Se lleva una copla el viento
Por entre calles estrechas
de tabernas y mesones
se llevó una compla el viento,
una compla que es lamento de guitarras y algodones.
Nace en la noche que llora,
en la casca soñolienta un cante que solea.
Solea en la madrugada como una espina clavada,
y en quien quiere de verdad.
Y yo sé que tú eres causa
de mi muerte y mi vivir.
Una guitarra no encuentro
para cantar lo que siento y lo que pienso de ti.
Yo lloro en el oliva,
pero mi guitarra duerme,
y quiere estarse callada,
sin mi tristeza canta.
Porque no podría cantarte
la verdad de mi lamento
para irse con el viento
convertida en solea.
Nace en la noche que llora,
en la casca soñolienta un cante que solea.
Solea en la madrugada como una espina clavada,
y en quien quiere de verdad.
Solea en la madrugada como una espina clavada,
y en quien quiere de verdad.
Solea en la madrugada como una espina clavada,
y en quien quiere de verdad.